Artículo 1/5
Bajo el grito “No nos callarán” más de quince emisoras de la Unión de Radios Libres y Comunitarias de Madrid denuncian la privatización del espacio radioeléctrico que vulnera derechos fundamentales en materia de libertad de expresión, tal y como contempla en la Constitución Española o la Declaración de Derechos Humanos. Aunque, desgraciadamente, sus gritos parecen estar siendo en vano, pues el Gobierno no los ha escuchado y la nueva Ley Audivisual ya está aprobada.
A partir del 18 de marzo, las radios libres y comunitarias con fines sociales y culturales que emitían al margen de la legalidad pasan a ser ilegales y empezarán a ser eliminadas. La única solución que tienen para sobrevivir es que se les conceda una licencia oficial para emitir en la FM, pero si el sistema no cambia esto seguirá siendo imposible.
Actualmente, las licencias se conceden por Comunidades Autónomas y las emisoras compiten presentando sus capacidades técnicas, omitiéndose el contenido de las mismas. Obviamente, radios no lucrativas con escasas financiaciones difícilmente podrán competir con el desarrollo tecnológico de las comerciales.
Actualmente, las licencias se conceden por Comunidades Autónomas y las emisoras compiten presentando sus capacidades técnicas, omitiéndose el contenido de las mismas. Obviamente, radios no lucrativas con escasas financiaciones difícilmente podrán competir con el desarrollo tecnológico de las comerciales.
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