Todos los enamorados tienen un día marcado en el calendario. El 14 de febrero es el día elegido para demostrar y reafirmar el amor mediante regalos, dedicatorias, poemas... pero ¿por qué celebramos ese día? ¿De dónde surge la tradición?
Existen diversas teorías que otorgan a esta fecha el origen del Día de los Enamorados:
En los países nórdicos es durante estas fechas cuando se emparejan y aparean los pájaros, de ahí que este período se vea como un símoblo de amor y de creación.
Algunos creen que es una fiesta cristianizada del paganismo, ya que en la antigua Roma se realizaba la adoración al dios del amor, cuyo nombre griego era Eros y a quien los romanos llamaban Cupido.
Otras fuentes centran el origen de la historia de San Valentín en la Roma del siglo III, época en la que el cristianismo era perseguido y los matrimonios entre los soldados eran prohibidios porque se creía que los hombres solteros rendían más en el campo de batalla al no estar ligados a una familias. Es, en ese momento, cuando surge la figura de San Valentín, un sacerdote cristiano que decide realizar bodas secretas sin que se enteren los romanos. Más tarde, el emperador romano Claudio II oredenaría su ejecución un 14 de febrero. Valentín se convirtió en el símbolo del amor por haberlo defendido hasta la muerte.
Dos siglos después, la Iglesia Católica recuperó esta histroria y canonizó a San Valentín como patrón de los enamorados.
Actualmente, esta fiesta se ha convertido en uno de los grandes negocios de los comercios que ven como ese día las ventas de flroes, postales, bombones... en definitiva, regalos de todo tipo... aumentan considerablemente. Juzgen ustedes mismos: ¿Negocio o romanticismo?
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